Como empresa referente en bonos verdes y mayor emisora de este tipo de bonos en todo el mundo, Iberdrola prevé y tiene como objetivo superarse en el nuevo año.

¿Qué son los bonos verdes y para qué se utilizan?

Básicamente, los bonos verdes son un tipo de deuda emitida por instituciones públicas o privadas, con una peculiaridad.

Los fondos obtenidos mediante estos créditos, irán exclusivamente destinados a la financiación o refinanciación de proyectos sostenibles y socialmente responsables. Éstos comprenden todo lo relacionado con las energías renovables, la eficiencia energética, la prevención y el control de la contaminación, la gestión sostenible de los recursos naturales y el uso de la tierra, la conservación de la biodiversidad terrestre y acuática, el transporte limpio,  la gestión responsable de los residuos, la adaptación al cambio climático, los productos adaptados a la economía ecológica y/o circular y los edificios ecológicos.

Sin duda, en la actualidad la emisión de bonos verdes va en aumento y se prevé un crecimiento muy fuerte en este tipo de mercado, ya que nos encontramos en un entorno en el que cada vez hay más conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad y se trabaja para ello.

Iberdrola, empresa pionera en los bonos verdes

La primera emisión de bonos verdes de la compañía fue en 2014 por lo que Iberdrola es pionera en este sector en España.

En la actualidad, la iniciativa que tomó la empresa y su éxito, se ha extendido a otras vías que en los inicios no se contemplaban como los bonos híbridos, una financiación bancaria y una línea de crédito de 5.300 millones de euros destinada a proyectos medioambientales.

Estos bonos son muy parecidos a los bonos tradicionales, con aspectos similares en cuando a formato, duración y vencimiento y en los mismos mercados. Lo único que marca una diferencia es que, como hemos dicho en el punto anterior, los bonos verdes son financiación para proyectos medioambientales.

La finalidad de estos es ayudar a diversificar la base inversora e intentar dirigir la economía española hacia la descarbonización. Aunque existen empresas que lo utilizan como elemento de marketing o de apoyo para evitar el incremento de los costes respecto a la financiación tradicional.

Por todo esto, cada vez más la política de inversión está favoreciendo las inversiones verdes y los proyectos de Iberdrola han tenido un crecimiento y acogida considerable en los últimos años, que parece que no va a frenarse.

Tras haber sido el principal emisor corporativo mundial en 2016 y 2017, la compañía energética anuncia que su objetivo para 2018 es superar los 2.000 millones de euros de emisión de bonos verdes. Aunque son conscientes de que esta cifra puede variar en función de los mercados y las necesidades finales de financiación.

 

Fuente: http://www.expansion.com/mercados/2018/02/07/5a7b1104e5fdea5a1c8b45d4.html

Imágenes: https://www.iberdrola.com